Cuando tus auxiliares auditivos no funcionan como deberían, puede ser frustrante y afectar tu calidad de vida. Afortunadamente, muchos problemas comunes tienen soluciones sencillas que puedes intentar antes de llevar tus audífonos a reparación. A continuación, te ofrecemos algunos pasos prácticos para solucionar problemas de funcionamiento:
1. Revisa las baterías o la carga: Uno de los problemas más comunes es la falta de energía. Si usas auxiliares auditivos con baterías desechables, prueba cambiándolas por unas nuevas. Si tus auxiliares son recargables, asegúrate de que estén completamente cargados. Una batería baja puede causar interrupciones en el sonido o que los audífonos no enciendan.
2. Limpia los audífonos: La acumulación de cerumen y suciedad puede bloquear los micrófonos o la salida del sonido de los auxiliares auditivos, afectando su rendimiento. Limpia tus auxiliares con un paño suave y seco. Asegúrate de revisar y cambiar los filtros de cera o limpiar la punta del mólde auditivo y verificar que no se encuentren obstruidos Mantener los auxiliares limpios es esencial para un funcionamiento óptimo.
3. Verifica los ajustes: Asegúrate de que los auxiliares auditivos estén configurados correctamente. Verifica que no estén en modo silencioso o con el volumen demasiado bajo. Si tienes una aplicación móvil para controlar tus auxiliares, revisa que todo esté ajustado según tus preferencias, en caso de contar con un auxiliar de pila desechable, basta con abrir y cerrar el portapila para que vuelva a la configuración standar.
4. Soluciona los pitidos de retroalimentación: Los pitidos fuertes y agudos, conocidos como retroalimentación, pueden ser un problema molesto. Esto generalmente ocurre cuando el sonido del auxiliar se filtra y es recogido nuevamente por el micrófono, creando un bucle de sonido. Asegúrate de que los auxiliares estén bien ajustados en tus oídos y revisa que no haya obstrucciones en los tubos o domos. Si los pitidos persisten, prueba reducir el volumen ligeramente o consulta a tu especialista, ya que podría ser un problema de ajuste o configuración.
5. Revisa los tubos y domos: Ya sea que tus auxiliares usen tubos, domos o moldes es importante que estén en buenas condiciones. Los tubos, domos, manugueras y moldes pueden endurecerse o agrietarse con el tiempo, lo que afecta la calidad del sonido. Revisa que no estén bloqueados ni dañados y considera reemplazarlos si es necesario.
6. Consulta con un profesional: Si después de seguir estos pasos tus audífonos aún no funcionan correctamente, es hora de consultar con un especialista. Podría ser un problema técnico que necesite asisitencia profesional. Nunca intentes abrir o reparar los auxiliares por tu cuenta, ya que esto podría causar daños mayores.
Mantener tus auxiliares en buen estado es clave para disfrutar de una audición clara y cómoda. Siguiendo estos pasos, podrás solucionar muchos problemas comunes por ti mismo. Y recuerda, siempre puedes contar con la ayuda de un profesional para cualquier inconveniente que no puedas resolver por tu cuenta.
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Fuente:
-López, M. A., & García, R. (2018). Cuidado y mantenimiento de audífonos: Guía práctica para usuarios y profesionales. Editorial Audiológica.
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